El proyecto fue presentado por las diputadas Maite Orsini (Revolución Democrática), Camila Rojas (Comunes) y Gael Yeomanns (Convergencia Social) y fue aprobado por 81 votos a favor, tres en contra y 39 abstenciones.
Esta práctica es conocida como “stealthing” (del inglés “sigiloso”) y consiste en retirarse el condón de manera no consentida por la pareja durante el acto sexual. De esta manera se expone a la pareja a enfermedades de transmisión sexual y a embarazos no deseados, además de ser un tipo de violencia.
La iniciativa debe volver a las comisiones para ser discutida.